El archipiélago canario está compuesto por siete islas: Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife, La Gomera, La Palma y El Hierro, más seis islotes de los cuales el único habitado es La Graciosa, ligado administrativamente a Lanzarote.
Clima de Tenerife
Tenerife, ubicada en el centro del Archipiélago y con una superficie de 2.034 Km2, es la mayor de las siete islas. Su clima, dominado por la presencia de los vientos alisios, es muy suave, templado y moderado en cualquier época del año. Si en todos los climas el relieve es importante, en Tenerife, su importancia es redoblada.
La altura no sólo modifica la temperatura sino que diferencia zonas de sol permanente con zonas de marcada sombra durante el año (solana y umbría respectivamente), creando bellos parajes de exhuberante vegetación en las zonas más húmedas y hermosas zonas de playa y sol en las tierras más bajas.
Así, se habla de zona costera entre 0 y 500 metros; de medianía entre 500 y 1.500 m; y de cumbre, por encima de los 1.500 m. La compleja y escarpada orografía de Tenerife alcanza los 3.718 metros de altura en la cima del Teide, el punto más alto de España.
La temperatura media en las zonas costeras (solana) es de 17 a 24 grados en el invierno y entre 24 y 30 grados en el verano.
Historia de Tenerife
La Historia de Tenerife y sus gentes, como la del resto del archipiélago, está marcada por su tardía incorporación al mundo occidental. Aunque hallamos claras referencias sobre su existencia desde la época clásica – entre otros, Horacio, Virgilio y Plinio -, es a partir del siglo XIV cuando las Islas Canarias reciben con más frecuencia la presencia de navegantes italianos, portugueses, mallorquines y castellanos, que arriban a sus costas buscando productos que los mercados europeos de entonces demandaban: sangre de drago, cueros, pieles o esclavos.
Este denominado «redescubrimiento» de Canarias al mundo occidental abrió el camino de la conquista del archipiélago, iniciado en Lanzarote por el normando Jean de Bethencourt y Gadifer de la Salle en 1402, y culminado por Alonso Fernández de Lugo con la incorporación de Tenerife a la Corona de Castilla en 1496.
Santa Cruz de Tenerife
La hermosa ciudad de Santa Cruz de Tenerife, cuyo desarrollo definitivo no se concreta hasta mediados del siglo XIX, es capital de la Isla y de la provincia de Santa Cruz de Tenerife, de la que también forman parte las islas de La Palma, La Gomera y El Hierro.
Sede permanente del Parlamento de Canarias, es definida como una ciudad cosmopolita, abierta y receptiva, con sabor y aspecto coloniales que han ido dejando paso a nuevas formas arquitectónicas y a un renovado trazado urbano de amplias avenidas y acogedoras plazas arborizadas.
Con más de 200.000 habitantes, Santa Cruz de Tenerife ha abierto sus puertas al siglo XXI con una revitalizada actividad comercial y una inusitada oferta cultural y de ocio. Aquí están representadas gentes de todo el archipiélago, costumbres y manifestaciones culturales autóctonas e internacionales.
Caminando sus calles podemos apreciar las más variopintas tiendas y ventas ambulantes, lujosos centros comerciales, restaurantes, bares y cafés, y una gran mezcla de gentes diversas, personajes de farándula, elegantes señoras de sociedad, turistas de compras, artistas, cuidadores de coches, sofisticados ejecutivos y toda una gama de profesionales independientes producto de un amplio sector económico informal. Aún se ve, en alguna esquina, un lustrabotas con sus cuidados aperos de trabajo.
En Tenerife se encuentra ubicada la playa más popular de Tenerife, la playa de Las Teresitas, con arena dorada importada del Sahara.
La Laguna
Junto a Santa Cruz de Tenerife, muy pegadita a ella, se alza La Laguna, ciudad que fuera el primer emplazamiento urbano de Tenerife. Su fundación data de finales del siglo XV. Antigua capital de la Isla, presenta un núcleo histórico de imponente riqueza arquitectónica, apenas maltratado por la modernidad, que ha sido recientemente declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. Es cuna de la primera universidad de Canarias, con nutrido ambiente estudiantil.
Puerto de La Cruz, La Orotava e Icod de los Vinos
A tan solo unos kilómetros de La Laguna, unidas por una amplia y rápida autopista, se encuentras otras sorpresas urbanas de Tenerife: la imponente y moderna ciudad del Puerto de La Cruz, con lujosos hoteles y trepidante vida nocturna, la Villa de La Orotava, ciudad antigua de incomparable belleza arquitectónica, e Icod de los Vinos, preciosa ciudad donde se puede admirar el drago «milenario» (árbol liliáceo del cual se obtiene una resina, la llamada «sangre de drago», muy apreciada desde tiempos antiguos por sus virtudes medicinales), que pese a su denominación, promovida por el romanticismo popular, probablemente no supere los 600 o 700 años de edad.
Vinos de Tenerife: denominaciones de origen
Tenerife es una isla bondadosa, amable y bella, dueña de excelentes tierras que han marcado el carácter agrícola de sus gentes. Sobre todo, en las comarcas del norte, zonas húmedas y ricas en viñedos. De sus cepas se extraen excelentes vinos comercializados con sus respectivas denominaciones de origen (Tacoronte-Acentejo, Valle de la Orotava o Ycoden-Daute-Isora).
La división insular en cinco comarcas vitivinícolas, diseñada por el Cabildo de Tenerife, otorga además a la vertiente sur otras dos denominaciones de origen, Abona y Valle de Güímar, todas ellas de reconocido prestigio, que viven al amparo de sus respectivos consejos reguladores.
Puerto de Tenerife
Tenerife posee también un importante puerto, el de su capital, nudo de comunicaciones interinsulares y de enlace de tres continentes: Europa, África y América. Posee otros puertos menores, como el de Los Cristianos, caracterizado como punto de unión de la provincia con salidas constantes hacia las islas de La Gomera, La Palma y El Hierro, que atraen por su belleza a miles de turistas cada día.
Aeropuertos de Tenerife
Dos aeropuertos sirven de enlace internacional y local: el Aeropuerto Internacional Reina Sofía, piedra angular del desarrollo turístico del sur de Tenerife y uno de los de mayor movimiento en España; y el de Los Rodeos, muy próximo a la ciudad de La Laguna, hoy dedicado principalmente al tráfico interinsular y peninsular.
Una excelente red de vías de comunicación y una completa red de guaguas (autobuses), contribuyen a aportar facilidades y comodidad al visitante de Tenerife, que disfruta, por lo demás, del confort de las más completas instalaciones hoteleras del mundo actual, con gran solvencia y calidad de servicios.
Tenerife es hoy un destino turístico de primer orden. Su oferta de ocio destaca por su enorme variedad. Existen múltiples actividades de interés cultural: museos como los de la Naturaleza y el Hombre, etnográficos o de Historia; teatros, cines, salas de exposiciones, festivales y conciertos de carácter nacional e internacional; científicas o ecológicas como el Museo de la Ciencia y el Cosmos, el Jardín Botánico o el Loro Parque; o festivas con bailes de tradición o carnaval – el Carnaval de Tenerife, en el mes de febrero, es el segundo en importancia después del Carnaval de Río de Janeiro.
Además de todo lo dicho, las playas, las actividades del mar y la noche con sus singulares atractivos – restaurantes, pubs, salas de fiesta, casinos, etc. – hacen que Tenerife sea un fascinante universo de emociones, ritmo y música para el visitante frecuente u ocasional.
Turismo en Tenerife
Tenerife es uno de los destinos turísticos más populares del mundo. Su cálida temperatura durante todo el año y sus espectaculares paisajes volcánicos, así como sus playas, deportes acuáticos y vida nocturna, aseguran su constante popularidad.
Es la gran dama de la familia del archipiélago. Atrayendo a más de 10 millones de visitantes al año, los resorts más famosos del sur de la isla ofrecen todo tipo de actividades y sus numerosos clubes nocturnos combinados con playas espectaculares harán tus delicias. Pero si damos un paso más allá de las obvias atracciones turísticas, encontraremos una isla culta y de extraordinaria diversidad.
Vacaciones en Tenerife
Tenerife es la isla más grande de las Islas Canarias. Es el destino favorito de los amantes del sol. También es un destino perfecto para jóvenes, adultos y familias.
Los amantes de la naturaleza podrán elegir el norte de la isla por sus piscinas naturales, mientras que los amantes de las hermosas playas irán hacia el sur.
Temperatura en Tenerife
El clima es perfecto durante todo el año en Tenerife (nunca menos de 18 grados en invierno y raramente más de 30 grados en verano).
Volcánica, turística e increíblemente variada. Esta es Tenerife, la isla más visitada de Canarias
Tenerife se caracteriza sobre todo por su diversidad. Variedad de paisajes, costas, pueblos y aldeas… Entre las maravillas por descubrir se encuentran tres notables ciudades coloniales: La Laguna (Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO); La Orotava, apoyada sabiamente en una colina, y Garachico, una adorable pequeña ciudad costera.
A estas históricas poblaciones se suman tres hermosos parajes naturales con senderos para practicar senderismo, impecablemente mantenidos: el Parque Nacional del Teide en el corazón de la isla, un magnífico volcán y el punto más alto del país; el Parque Rural de Anaga en el extremo noreste, cubierto de una espesa vegetación, la laurisilva, y que ofrece magníficas vistas al mar; y el Parque Rural de Teno en el extremo noroeste, aún más salvaje y menos frecuentado. Estos sitios por sí solos son una razón para venir a Tenerife para aquellos que quieren hacer senderismo y trekking.
El Teide
Tenerife está dominada por el gran volcán Teide y la isla se eleva de todas las direcciones hasta su cima nevada. Rodeando la cima se encuentra el impresionante paisaje volcánico que ahora se encuentra protegido por el Parque Nacional del Teide.
Tenerife. ¿Dónde ir? ¿Norte de la isla? ¿Sur?
Al norte de Tenerife el paisaje es más bonito con su clima más húmedo y exuberante vegetación. Puerto de la Cruz, La Orotava y Garachico son excelentes destinos turísticos en el norte de Tenerife. Visita también el pueblo más bonito de Tenerife, Masca.
El sur de Tenerife es más caliente y tiende a atraer a más visitantes a la isla. Los Cristianos es uno de los principales centros turísticos al igual que Costa del Silencio y Las Galletas. Para aquellos que buscan clubes nocturnos y un ambiente de fiesta, la Playa de las Américas y la vecina Los Cristianos son los lugares a los que hay que ir.
Actividades en Tenerife
Tenerife es también un destino ideal para el buceo, la observación de tortugas, ballenas y delfines, la práctica del golf, ciclismo, senderismo, parapente…
Este popurrí de experiencias incluye paseos por las tiendas de diseñadores, incursiones en parajes de lava volcánica, una sexy y sensual celebración de Carnaval, que es el segundo después de Río, y una increíble variedad de museos, templos de arte moderno y antiguas ciudades coloniales.
Alojamiento en Tenerife
En Tenerife es imposible que no encuentres una opción para alojarte que se ajuste a tus gustos y necesidades: hoteles de lujo, de cinco estrellas, hoteles económicos, baratos, casas rurales, albergues para mochileros… Es tanta la oferta y de tan variados precios que puede llegar a ser toda una ardua tarea el decidirse por uno u otro.
Playas en Tenerife
En Tenerife podrás elegir entre las bellas playas de arena fina del sur de la isla o las playas de piedras de más difícil acceso del norte de Tenerife, auténticos paraísos ocultos. Respecto a las playas de arena podrás encontrarlas también de arena negra de origen volcánico.
Restaurantes en Tenerife
La oferta gastronómica es muy variada y son numerosísimos los restaurantes que hay por toda la isla. Encontrarás desde restaurantes de diseño, con cocina de fusión, restaurantes tradicionales para deleitarte con la gastronomía típica de las Islas Canarias hasta los típicos Guachinches, que son restaurantes tradicionales que han sido autorizados como tales debido a que sus propietarios producen vino propio; dependiendo de la producción anual de vino que realicen, disponen de un determinado número de meses al año para permanecer abiertos, pues su objetivo es la venta del vino producido, aunque acompañada de magníficas carnes a la brasa. No hay que perdérselos.